Cuando Carmen me llamó para hacerles unas fotos a sus peques supe que sería una sesión muy especial.
Valería y Gonzalo son unos preciosos niños llenos de vitalidad y complicidad. Y aunque sus papis al principio no habían pensado en salir en las fostos, por suerte, logre convencerlos, porque yo no imaginaba la sesión sin ellos.
Nunca concibo una sesión infantil en la que solo fotografíe a los niños, me gusta hacer sesiones familiares, en las que la familia al completo simplemente se relaje y sean ellos mismo delante de mi cámara. Sus juegos, sus interecacciones sus risas, esos momentos que al revivirlos te puedan emocinar, son los que me gustan captar.